La vida se manifiesta en el cuerpo. Todas las emociones se hacen perceptibles a través de él: si estamos angustiados sentimos un nudo en la garganta; si nos asustamos se nos eriza el vello, y al enamorarnos las mariposas nos revolotean en el estomago. Y al contrario, evitamos el sufrimiento bloqueando los sentimientos y, con el paso del tiempo, esos bloqueos se manifiestan en forma de tensiones musculares crónicas. El cuerpo habla por sí mismo, tan solo debemos descubrir qué nos está comunicando.
Alexander Lowen, creador del sistema terapéutico conocido como Bioenergética, nos demuestra en su apasionante biografía que la terapia basada en el trabajo corporal y la respiración profunda nos permite superar bloqueos, recuperar la conciencia del propio c…